Los acontecimientos, como verás, siguen desarrollándose con más o menos
prisa o con más o menos pausa. Vas a ver que muchas de las personas que han
aparecido por aquí siguen haciéndolo. Otras no. Sinceramente, y a pesar de ser
yo quien está escribiendo todo esto, las que no vuelven a aparecer no sé muy
bien por qué. No es porque se hayan muerto, ya que algunas de las muertas, como
Genoveva o la propia hija menor de Jose, el protagonista, están en el más allá
y siguen aquí al mismo tiempo. Como digo, que esto sea así no es
responsabilidad mía. En todo caso habría que preguntarle a Dios o al Destino o
a alguien que posea algún tipo de poderes especiales de los que yo carezco. O
incluso cabría preguntar al protagonista-narrador; aunque él no tiene poderes
más que los propios de un psicoanalista que es capaz de interpretar la mente
humana. Aunque poco. Yo, personalmente, solo puedo jugar con las palabras, los
recuerdos y la imaginación como he venido haciendo hasta ahora. O sea, con el
lenguaje. Y seguiré más o menos así hasta que la narración termine. Aunque, de
acuerdo con la psicóloga norteamericana Harlene Anderson, las narraciones —como
las conversaciones, en palabras suyas— no terminan nunca.
A partir de la parte cuatro irrumpe con potencia una persona que
adquiere un protagonismo muy especial en la vida del doctor Gómez: Yanice. Ella
ha estado ya por aquí de una manera bastante tangencial. Desde esa parte,
sin embargo, su protagonismo es tremendo. Ya lo verás. Y tal vez te emociones
con algunas de las cosas que pasan. Yo, personalmente, he de decir que estoy
fascinado con ella. Ya me contarás qué te parece a ti cuando llegue el momento.
A ver, resumamos. Además de Kerena que tiene una presencia casi absoluta en
todo el libro (y la seguirá teniendo hasta el final, como verás), siguen
presentes tres de las otras chicas que aparecen al principio: Marta, Genoveva y
Lilith. Las tres fueron atendidas por Jose en su consulta psiquiátrica. ¿Tiene
esto algo que ver con el posterior desarrollo de los acontecimientos, bastantes
de los cuales ya conoces? Yo creo que no, que todo es más bien fruto de la
casualidad. Pero no puedo negar que hay algunas pistas que las conectan ya
desde entonces y lo siguen haciendo ahora. Si acaso, yo dejaría esto como una
intuición. Seguir esas pistas seguramente haría esta novela interminable, ya
que son indicios mentales. Y, según mis humildes ideas como psicólogo, la mente
es infinita. Y, en general, insondable. O sea, que si intento dar a la
narración una linealidad más allá de su propia lógica interna, lo más probable
es que nos pasemos páginas y páginas dando vueltas en círculos. No encuentro
una estructura racional o de causa-efecto más allá de lo que has leído hasta
ahora o leerás próximamente. De haberla, la estructura, es más bien rizomática.
O sea que no sabemos dónde va a volver a aparecer tal o cual persona, qué va a
hacer, cuál va a ser su singularidad en próximos desarrollos de los
acontecimientos.
Creo que de Kerena no hace falta que te explique mucho más. Aunque tal
vez ella te sorprenda un poco en lo que queda de narración. No mucho. Al fin y
al cabo es bastante previsible, ¡qué le vamos a hacer!
Marta es la que fue prostituta de lujo, ¿la recuerdas? Muere en un
accidente pero sigue viva. ¿Sabes cómo es eso o por qué? Yo tampoco. Y eso que
Gómez le pregunta. Pero no hay respuesta. De su marido apenas sabemos nada. De
su amante, Pablo, sí. Es el del barco, un fascista de alto nivel.
Genoveva es la que fue modelo de moda de jovencita. La que sus padres
biológicos son hermanos y él la viola a ella, a su hermana, y esta se
queda embarazada de la chica y no aborta porque entonces no está bien hacerlo.
También la viola a ella, a la chica, su hija. Y mata a su madre y después se
suicida. Más tarde Geno tiene un bebé y a los dos meses se acuesta con su
ginecólogo. Su marido se entera (tampoco sabemos mucho de él) y la mata en el
BMW® en Finisterre muriendo también. ¿Correcto? Pero sigue viva.
Insisto en que desconozco los motivos.
Lilith es la que es la paciente más difícil de nuestro psiquiatra
protagonista de la historia. La que es buena estudiante y creyente practicante
católica. La que no tiene amantes. Sí que sabemos algo de su marido, Manuel.
Nos lo cuenta ella misma; pero después desaparece de escena. Invoca en varias
ocasiones a un tal Helio. Creo que es un ángel espiritual. Y también creo que
tiene algo que ver con Kerena (de quien Lilith se hace especialmente amiga).
Pero el narrador-protagonista no nos da muchas más pistas ni hace explícita esa
tenencia que ver. Así que podemos o bien olvidarlo o bien imaginar cualquier
cosa de él. Del tal Helio. Si quisiéramos hacerlo. Aunque creo que no es
necesario invertir mucho tiempo en ello.
Resumiendo, que las tres chicas, con sus diversas historias que, al fin
y al cabo, son ellas —como todas y todos somos nuestras propias historias—,
coinciden con Kerena seguramente también por casualidad en el Bar de la
Esquina. Poco a poco descubren más o menos quién es ella y se alían para
defenderla del supuesto ataque que le lanza el psiquiatra junto a Yanice y su
muerta hija, Karol, más adelante. Esto todavía no ha ocurrido y no quiero
adelantar acontecimientos, por supuesto. Pero bueno, así nos vamos situando un
poco.